Trabajo cada detalle de mi producto ideal, resultado de mi fantasía. Sino me gusta me regreso y si de repente tengo prisa por llegar al momento cumbre la adelanto, la reinvento, la recreo y la oxigeno.
El viaje ideal con mi amor platónico, la cita perfecta o la magistral ejecución de un baile, al fin que soñar no cuesta nada. Y cuando veo películas como 500 days of Summer, taaarará tarararará tará tará, la realidad me grita “despierta, despierta, abre los ojos".
Creo que es un tipo de felicidad que se apodera de mi cuerpo, y que cuando me la creo demasiado...
¿Qué pasa?
Pues sonrío sin causa aparente, a veces frente al espejo, a veces en el tráfico, a veces a la noche y otras a la gente.
Si, soñar no cuesta nada pero despertar a veces cuesta mucho, idealizar la vida, fantasear con lo que no existe, tengo que tener cuidado con creerlo demasiado, todo tiene su revés y ahora me doy cuenta que no eres como creo, sucedes al revés de mi fantasía, bienvenida la realidad, fantasía nunca me abandones.
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